Es una técnica usada en construcción y diseño de interiores, orientada a mantener un ambiente confortable, independientemente de las condiciones climáticas que imperen en el exterior, lo cambiante de éstas y el tipo de construcción. Para esto se emplean variadas formas de acondicionamiento durante la construcción o instalación de los elementos de un recinto, esto para controlar la temperatura y crear una sensación confortable en el ambiente.
Un ambiente se considera aclimatado cuando se consigue equilibrar la temperatura de la estructura con la del suelo del ambiente, a fin de que la sumatoria de sus valores sea igual a la temperatura promedio del cuerpo humano de 37 grados Celsius. El equilibrio térmico produce una sensación de comodidad y tranquilidad; y el ambiente se presta para un desempeño óptimo de las actividades.
Este efecto de climatización se centra en dos principios: calentar o enfriar el espacio artificialmente para equilibrar con la temperatura ambiente y proporcionar la sensación de comodidad. Existen para tal fin dos tipos de sistemas, el de refrigeración y el de calefacción.
La refrigeración, que explicaremos en este artículo, es más sencilla. Ésta se puede conseguir con un sistema de ventilación o enfriamiento de aire a través de un equipo electromecánico, como los ventiladores y aires acondicionados.
El ventilador, de uso común, consiste en un aparato de motor eléctrico que hace girar un aspa que mueve el aire dentro del recinto. Ese aire se desplazará a una alta velocidad haciendo que se enfríe rápidamente al circular, logrando el efecto de enfriamiento del espacio. Para conseguir un mejor efecto, se instalan varios de estos aparatos en distintos puntos del espacio a equilibrar, de modo que el aire circule en todas direcciones. La mayoría de estos equipos tienen sistema giratorio u oscilatorio, por lo cual pueden mover el aire en todas direcciones.
Un sistema de aire acondicionado puede ser de dos formas: de acción local o de acción general. Cuando el aparato es de acción local, dentro del mismo equipo se encuentra un motor eléctrico que hace girar unas aspas alongadas y con forma ondulada que tienen un efecto de pala para mover el aire al girar, o un cilindro cuyas palas hacen el efecto de un motor a reacción que arrastran el aire dentro de él y lo conducen hacia un punto específico.
Todo aire acondicionado dispone de un sistema de enfriamiento por gases. Estos gases están contenidos en una tubería interna que al contacto con el aire a gran velocidad, se enfría y ese aire retorna al ambiente con la temperatura ya reducida por el gas en las tuberías, mientras mas rápido gire el sistema de arrastre de aire, mas frio será este despedido hacia el ambiente que se desea aclimatar. Es importante que el ambiente se mantenga cerrado para que el aire enfriado no se ponga en contacto con aire caliente del ambiente exterior.